Lanús le propinó una dura derrota, por 110 a 72, en el inicio de la serie de la Liga Argentina de Básquetbol.
El arranque de la serie por los cuartos de final de la Liga Argentina de Básquetbol definitivamente no fue lo esperado para Quilmes. Lanús lo dominó de principio a fin, en el estadio “Antonio Rotili” y se impuso por un categórico 110 a 72.
Tan categóricas las cifras como el desarrollo. Es cierto, el “tricolor” no pudo contar con Agustín Ecker -una pieza vital en el esquema del equipo marplatense-, quien sufrió una fuerte contractura en el segundo juego ante Hispano Americano.
Pero nunca pudo competir ante un rival inspirado, que se mostró impiadoso y además usufrucutó al máximo las falencias quilmeñas.
Las flojas respuestas defensivas fueron una constante durante todo el partido. Y como el “granate” estaba muy preciso, las diferencias fueron abriéndose rápidamente: 15-7, 18-11 y 21-9.
El buen ingreso de Rodrigo Acuña no alcanzó para contrarrestar las corridas fulgurantes del local. Y Quilmes tampoco ofrecía garantías para defender el ataque fijo. Casi nunca llegaron a tiempo los cambios para interceptar el pick and roll.
El tiro abierto de Quilmes se activó en el arranque del segundo cuarto. Así, la visita anotó sus puntos más o menos habituales. Pero se mostró muy frágil atrás. No pudo frenar las penetraciones y permitió que Lanús anotara seguido y en cantidad, con porcentajes de ensueño: 61% en dobles y 50% en triples.
Se esperaba una recomposición de imagen que no llegó para Quilmes en el segundo tiempo. Lanús se mantuvo intratable y la ventaja continuó ampliándose sin interrupciones.
Literalmente, el “granate” lo pasó por arriba. Fue un vendaval que arrasó con su adversario. Las diferencias fueron abismales y el ganador no sintió en absoluto el mes que había pasado desde su último partido.
Al llegar al final del tercer cuarto, Quilmes había recibido 90 puntos y fue ineludible que el entrenador Luis Fernández se planteara la duda de cuidar piernas en un plantel reducido de cara al partido del domingo, a riesgo de sufrir una derrota catastrófica, o continuara batallando sin demasiadas aspiraciones.
La decisión fue un término medio, para no exponer del todo a los que menos juegan, aunque nada cambió demasiado. El entrenador Sebastián Saborido utilizó a sus doce jugadores (doce) y todos anotaron al menos 1 puntos. Y cinco de ellos lo hicieron en doble dígito (convirtieron 11 o más). Al local el salió todo redondo y picó en punta. El domingo será el desquite.
Síntesis
Lanús 110
A. Lugli 16, J. Ríos 16, L. Capponi 13, J. Scacchi 8 y F. Alorda 11 (FI). D. Patterson 16, M. Gago 7, L. Di Muccio 9, M. Franchino 5, F. Castiarena 1, V. Campano 3, A. Sánchez 5. DT: Sebastián Saborido.
Quilmes 72
L. Cequeira 8, J. Ruiz 9, L. Fernández 15, E. Giménez 4 y T. Verbauwede 13 (FI). R. Acuña 9, T. Ghietti 5, G. Sala 2, L. Luna 5. DT: Luis Fernández.
Estadio: “Antonio Rotili”, de Lanús.
Árbitros: Pedro Hoyo, Maximiliano Cáceres y Martín Pietromónaco.
Parciales: 25-16, 53-39 y 90-56.